ROSÁCEA

Llamada a menudo “acné rosácea”, y en las formas más leves “cuperosis”, la rosácea es una enfermedad cutánea crónica que se caracteriza principalmente por enrojecimiento facial, condición que se observa en todos los tipos de rosácea. Afecta a más de 40 millones de personas en todo el mundo; en el año 2002 los expertos definieron 4 subtipos: 1.- eritematotelangectasico (enrojecimiento facial persistente), papulopustuloso (inflamatorio), fimatoso (crecimiento de nariz) y ocular (enrojecimiento de ojos); pudiendo también presentarse formas mixtas. El tratamiento de la rosácea es uno de los más frustrantes tanto para el dermatólogo, como para el paciente. La remisión completa de la enfermedad es más difícil que conseguir remisiones parciales, además el tiempo que se necesita estar en tratamiento suele ser tan largo como dos años. De todas las formas de rosácea, la forma inflamatoria con papulas y pustulas es la que mejor responde, al contrario las formas con un componente eritomatoso importante,  suele ser un verdadero desafío para el médico.