Las penicilinas son antibióticos beta- lactámicos
que inhiben la síntesis de la pared celular bacteriana.
Penicilinas G Y V
La penicilina es la droga tradicional de elección para el tratamiento de las
infecciones por neumococos y streptoccos, resultando también efectiva contra las actinomicosis y cerca de la
mitad de los organismos anaeróbicos comunes de la cavidad oral y tracto
respiratorio superior.
Poseen un gran margen de seguridad; y son toleradas a grandes dosis parenterales.
Se excretan a través de los riñones, y un deterioro renal puede llevar a una
elevada concentración de las mismas. Son capaces de desarrollar una
neurotoxicidad por su elevada concentración en líquido cerebroespinal.
Traspasan la barrera hematoencefálica satisfactoriamente por lo que pueden ser
usadas para fines terapéuticos, como lo son los procesos inflamatorios de
meninges.
Son destruidas por los ácidos gástricos, por lo tanto los compuestos orales
deben ser administrados una hora antes de las comidas o dos horas después de
ellas.
En un 5% de los pacientes se asocia una reacción de hipersensibilidad a la
penicilina. La reacción más común son las erupciones, las cuales pueden ser
tratadas con antihistamínicos, pero la práctica común es descontinuar el uso
de la droga. El rash se presenta de manera impredecible sólo en la mitad de las
subsecuentes administraciones de penicilina. En las infecciones severas en
pacientes con reacciones alérgicas (no urticaria), en las cuales no existe una mejor elección, se ha usado de manera segura la penicilina. La reacción severa
a la penicilina se presenta con urticaria, angioedema, asma y anafilaxis. Su
prevalencia es del 0.05% y de este porcentaje sólo e15- 10% son fatales. No
siempre es predecible, ya que no ocurre necesariamente en pacientes con historia
previa de reacción al fármaco. Las fatalidades suelen ocurrir después de su
administración por vía parenteral, por lo que se prefiere los preparados
orales para el manejo de los pacientes ambulatorios. Las reacciones alérgicas
de tipo cruzado se dan con todos los diferentes tipos de penicilinas. Las
penicilinas son desactivadas por los beta-Iactámicos, enzimas que actúan sobre
el anillo molecular beta-Iactámico presente en las penicilinas y varias
cefalosporinas. Las Beta-Iactamasas son producidas por el Haemophilus influenzae,
M. catarrhalis, anaerobios, varios de los organismos gram negativos y cerca de
todos los Staphylococcus aureus (que producen una beta- lactamasa específica:
penicilinasa). La creciente resistencia del S. Pneumoniae (cerca del 20% de las
cepas en EEUU) es mediada de manera completamente diferente por alteraciones en
las uniones proteicas de la penicilina, las cuales reducen (pero no previenen)
la unión de las penicilinas a las proteinas.
Penicilinas Antiestafilococos
Dentro de este grupo tenemos a la Meticilina, Oxacilina, Cloxacilina,
Dicloxacilina y Nafacilina. La Meticilina fue la primera penicilina resistente a
la hidrólisis causada por la penicilinasa y su nombre se aplica usualmente a
las drogas de esta categoría. La oxacilina, cloxacilina y dicloxacilina fueron desarrolladas subsecuentemente para uso oral.
La Nafacilina tiene solo uso parenteral. Estos agentes son más efectivos que la
meticilina frente a los staphilococcos, pero ninguna ofrece algún tipo de
ventaja a la penicilina vs streptococcos o pneumococcos. Su administración oral
debe realizarse en ayunas y la dicloxacilina adquiere los niveles séricos más
elevados de todas. El uso prolongado de nafacilina (por encima de 21 días)
puede producir neutropenia reversible. La indicación para su uso es la
infección causada por staphilococcos resistentes a la penicilina.
El S. aureus meticilino resistente se refiere a una cepa resistente al grupo
entero además de los antibióticos beta- lactámicos (todas las penicilinas y
cefalosporinas).
Aminopenicilinas
Las aminopenicilinas (ampicilina y amoxicilina), son activas frente a los
streptococcos y pneumococcos (excepto las cepas altamente resistentes a las
penicilinas). También poseen una gran actividad para los organismos gram
negativos, H. influenzae, Proteus mira bilis y muchos E. coli, excepto a la
Pseudomona aeruginosa. Se inactivan con las beta-Iactamasas (incluyendo
penicilinazas) por lo que no son efectivas contra las infecciones causadas por
staphylococcos. El ácido gástrico destruye a la ampicilina, pero la
amoxicilina puede darse con las comidas y los niveles séricos obtenidos con
esta última en fluidos de oído medio son considerablemente mayores a aquellos
alcanzados con la ampicilina.
Las aminopenicilinas generan más recciones de tipo alérgico (rash) que otras
penicilinas (aproximadamente un 7%), lo cual se observa particularmente en
pacientes con mononucleosis infecciosa a los cuales se les administró
Penicilina (65-90%). Aun cuando la amigdalitis exudativa es generalmente el
primer síntoma de una mononucleosis infecciosa, se prefiere el uso de otros
agentes que no sean aminopenicilinas.
Las cepas de H. influenzae ampicilino resistentes, muestran una prevalencia del
40% en los Estados Unidos y 20% a nivel mundial. Inclusive, las cepas de M.
catarrhalis ampicilino resistentes alcanzan hasta un 90% en EEUU.
Penicilinas aumentadas
En este grupo se encuentran: la amoxici]ina + clavulanato de potasio, ampicilina
+ sulbactam, ticarcilina + clavulanato de potasio y piperacilina + tazobactan.
Para combatir a las bacterias resistentes, se desarrollaron compuestos que
inhiben a las beta-Iactamasas tales como el ácido clauvulámico, sulbactan y
tazobactam. Estos agentes muestran escasa actividad antimicrobiana por sí
solos, pero tienen la capacidad de unirse de manera irreversible a las enzimas
de beta-Iactamasa que le confieren a ciertas bacterias la resistencia frente a
los antibióticos beta- lactámicos (penicilinas y cefalosporinas). Cuando se
usan conjuntamente, al ácido clavulámico restituye la actividad antimicrobiana
de la amoxicilina frente amicroorganismos usualmente resistentes, tales como el
H. influenzae, M. catarrhalis, S. aureus, B. fragilis y otros anaerobios.
Inclusive dicha combinación ha demostrado su efectividad en el tratamiento de
la otitis media aguda (aMA) y sinusitis, aun cuando dichas bacterias demostraron
ser resistentes al uso de amoxicilina sola.
Desafortunadamente estos compuestos
no influencian en la resistencia del pneunococco a las penicilinas, porque esta
no es mediada por beta- lactamasas.
Los efectos secundarios de tipo gastrointestinal (nauseas, vómitos y
I diarreas} suelen causar la suspensión I del tratamiento por parte de los I
pacientes, pero éstos se pueden disminuir si se toman durante las comidas junto
con algún preparado que I contenga lactobacilo.
El equivalente parenteral para la amoxicilina/clavulanato es la
ampicilina/sulbactam. Estas combinaciones son muy útiles para un amplio
espectro de infecciones de cabeza y cuello, ya que son activas para las
siguientes especies bacteria nos.
Bacterias Gram Positivas
Aerobias S. aureus S. epidermidis S. pneuminiae S. pyogenes
S. viridans Enterococcos
Anaerobias Clostridium Peptostreptococco Peptococco
Bacterias Gram Negativas
Aerobios
H. influenzae M. catarrhalis E.coli Klebsiella Enterobacter Proteus
N. gonorrhoeae
Anaerobios Bacteroides sp. incluido B. fragilis notablemente ausente de la lista anterior se encuentra la Pseudomona
aeruginosa. La combinación de ticarcilina con ácido clauvulánico o la más
potente, pireracilina con tazobactan actúan frente a la p~eudomona y crean una
combinación muy útil, especialmente cuando se presume que el agente infeccioso
es de tipo mixto es decir que la pseudomona está presente junto con un S.
aureus, 8. fragilis o con otros anaerobios.
Traducción de:
Fairbanks David: Repaso de. los antimicrobianos por categorías: Penicilinas
(Betalactámicos). In American Academy of Otolaryngology Head & Neck Surgery
Foundation (Edit):Terapéutica Antimicrobiana en Otorrinolaringología y
cirugía de Cabeza y Cuello. Alejandría, EEUU, 2003, Pág. 1-3.
|