Fascitis
Necrotizante
REPORTE
DE CASOS
Priscila
Alcocer Cordero MD +, Inés Zambrano Ormaza MD * , Jaime Benites
Solís MD** , Lisandro Cuadrado MD, Walter Barros MD ***
+Servicio
de Cirugía Plástica Hospital
del Niño “Francisco de Icaza Bustamante”
*
Unidad Cuidados Intensivos Hospital del Niño “Francisco de
Icaza Bustamante”
**
Clínico Intensivista Hospital Miguel H. Alcívar.
***Residentes
del Servicio de Cirugía Plástica Hospital del Niño
“Francisco de Icaza
Bustamante”
Resumen
Se
describe dos casos de pacientes pediátricos
que desarrollaron infecciones necrotizantes de partes
blandas, secundario a traumatismos múltiples y cirugías
previas.
Las
infecciones necrotizantes de partes blandas son infecciones cutáneas
a menudo poli-microbianas, que están asociadas con necrosis
tisular y que requiere una
intervención quirúrgica temprana y terapia antibiótica
para un manejo apropiado.
Tales
infecciones usualmente tienen una etiología bacteriológica
mixta aeróbica y anaeróbica.
Revisamos
aspectos del diagnóstico y tratamiento. Si el diagnóstico es
hecho temprano y el tratamiento es instituido rápido, el pronóstico
es bueno.
Palabras
clave: infecciones necrotizantes, fascitis.
Astract
We
describe two cases of pediatric patient that developed
necrotizing soft tissue infections, after mutiple trauma and
previous sugery.
Necrotizing
soft tissue infections are cutaneous infection, often
polymicrobial, that are associated with tissue necrosis and
require early surgical interntion and antimicrobial therapy for
appropiate management.
Such
infections usually have a mixed aerobic-anaerobic bacterial
etiology.
We
review the diagnostic and the therapeutic aspects. If the
diagnosis is made early and treatment instituted promptly,
prognosis is good.
Key
words: necrotizing infections, fasciitis.
Introducción.-
Fascitis
necrotizante, es una infección poco común y a menudo de
difícil diagnóstico en
estadio
temprano, de la
fascia superficial y tejido subcutáneo, que se asocia a
toxicidad sistémica, que tiene un curso fulminante y una alta
tasa de mortalidad de alrededor
33-60% (1-2-8).
Su
pronóstico depende de su temprano reconocimiento y
de un régimen de vigorosa resucitación, soporte
nutricional, antibiótico de amplio espectro y de
un agresivo debridamiento con mandatorias
reexploraciones, las cuales son cruciales en el tratamiento de
los pacientes. (3)
Fascitis
necrotizante es una infección del tejido blandos profundo que
envuelve la hendidura facial entre el tejido subcutáneo y la
fascia situada encima del músculo, que afecta secundariamente
la piel, respetando la fascia profunda y el músculo.
Su etiología es usualmente poli-microbiana,
una mezcla de bacterias aeróbicas y anaeróbicas, solo
el estreptococo beta-hemolítico del grupo A puede ser patógeno
por si solo, especialmente en pacientes jóvenes previamente
sanos, con presentación clínica de síndrome de shock tóxico.
Raramente son patógeno por sí mismo los anaerobios.
Esta
infección es particularmente común en pacientes con diabetes,
ulcera decúbito, drogadictos, alcohólicos,
inmuno-comprometidos o infección de heridas.(4).
Los pacientes politraumatizados son de alto riego para infección
nosocomial complicada que los pacientes sometidos a cirugía
electiva de rutina(5).
En el estudio de Brook et al, el 92% de los pacientes tuvieron
una predisposición o condición asociada: trauma (34%); cirugía
previa (20%); diabetes mellitus (18%); inmunosupresión (17%)
etc. (18)
El
diagnóstico puede ser establecido por exploración quirúrgica
a lo largo del plano facial. En los casos más indolentes la
biopsia de tejido por congelación ha sido útil (6), la resonancia nuclear magnética, puede resultar de gran ayuda para
determinar la extensión de la necrosis (15).
Reporte de
casos
Caso
1
El
primer caso se trata de un paciente pediátrico, de sexo
masculino de 11 años de edad, que ingresa al servicio de
urgencia por haber presentado politraumatismo, atropellamiento
por vehículo en movimiento. Presentando las siguientes
lesiones trauma abdominal contuso, el cual requirió laparotomía
exploradora, trauma pélvico con fractura oblicua de sacro,
luxación sacro-iliaca derecha y fractura de rama ilio-púbica
derecha. Además desgarro de partes blandas. A los 4 días de su
ingreso paciente presenta SIRS, con signos evidentes de infección
necrotizante severa de región dorso-lumbo-sacro-coxígea a
partir de D10, región inguinal y cara antero-posterior de muslo
izquierdo y cara postero-lateral de pierna izquierda.
Se
procede a realizarle debridamientos amplios, mas soporte vital
agresivo, más antibióticos de amplio espectro. Al décimo día
de su ingreso se procede a realizar ILPH con dermátomo eléctrico
tipo Padget , con donantes de los muslos derecho e izquierdo,
lográndose el 80% de la cobertura.
Caso
2
El
segundo caso es una paciente escolar, de sexo femenina, de 4 años
de edad, que ingresa al servicio de urgencia por haber
presentado politraumatismo, atropellamiento por vehículo en
movimiento. Presentando
TCE
moderado, Glagow 12/15, con fractura frontal izquierda. Fractura
expuesta de fémur izquierdo y del primer metatarsiano, mas
heridas profundas con pérdidas de sustancia y fractura de clavícula
izquierda.
Se
procede a realizar limpieza quirúrgica y fijación externa de
la fractura, mas aproximación de colgajos dermograsos. A los 4
días de la cirugía la paciente presenta SIRS, y signos
evidentes de infección necrotizante severa
de partes blandas de pierna izquierda. Procediéndose a
realizar debridamientos agresivos y manejo en terapia intensiva,
con soporte vital, mas antibióticos de amplio espectro. Luego
de múltiples intervenciones se procede a realizar injertos de
piel mallada.
Discusión.-
Un
aspecto problemático de las infecciones severas de piel y
partes blandas, es que en algunos casos,
la presentación característica de una infección
complicada [infección que envuelve tejido profundo { fascia,
músculo esquelético, tejido subcutáneo} y/o requiere cirugía
mayor ] (7),
son más consistentes con una infección no complicada,
resultando en un sub- óptimo manejo inicial (8).
El
diagnóstico temprano de fascitis necrotizante, es a menudo difícil
y es de suma importancia para el pronóstico (3),
puede ser establecido mediante la práctica de una biopsia de
tejido por congelación, para un rápido diagnóstico de esta
enfermedad en sus estadios tempranos, proveyendo un diagnóstico
definitivo y salvador. (6). La resonancia nuclear magnética, puede resultar de gran ayuda para
delimitar la extensión de la necrosis, en particular en la
interfase entre el músculo y la fascia, permitiendo establecer
la viabilidad de los tejidos profundos(15).
La
infección usualmente es poli-microbiana, con participación de
la flora de la piel, cocos aeróbico G+ ( Estafilococo
aureus, estreptococos pyogenes, agalactiae), especialmente
en el post-operatorio
de infecciones complicadas de piel y partes blandas (19).
El estreptococo b hemolítico del grupo A puede ser patógeno
por sí solo, especialmente en jóvenes previamente sanos, con
presentación clínica de Síndrome de Shock Tóxico(14).
Bacilos
aeróbicos G-, predominantemente: E. coli, Proteus species,
Klebsiell spp, Enterobacter, Pseudomonas spp, Acinetobacter spp
y bacterias anaeróbicas como: Peptoestreptocococs, Bacteroides
especies y Clostridiun especies [perfringens; septicum](14).
En
las infecciones necrotizantes de la piel y partes blandas, un
agresivo debridamiento y drenaje es requerido, la amputación
puede ser una alternativa en casos extremos, cirugía
reconstructiva [injertos de piel, by-pass arterial] y revisión
de la amputación (9).
El
retardo en el tiempo entre la admisión y el primer
debridamiento, afecta significativamente en el resultado final (
10-11-12-13),
también como un inadecuado drenaje y limitada incisión.
Completos y repetidos debridamiento de todo el tejido necrótico
debería ser realizado cada 24-48 horas hasta que la infección
este controlada.
La
importancia de un adecuado debridamiento es que disminuye la
mortalidad, esto ha sido confirmado en varios estudios previos (
10-11-12-13-14),
al igual que en los casos presentados por nosotros, creemos que
lo más importante es un diagnóstico precoz de la enfermedad y
un manejo inicial adecuado.
En
el estudio de Elliot et al, los pacientes que sobrevivieron
tuvieron un corto tiempo de espera entre la admisión y el
primer debridamiento( 3.1 vs 1.2 días ), con respecto a los que
fallecieron, reflejando que hubo un retardo o demora en el
tratamiento en los pacientes que no sobrevivieron(14).
El
significado de la extensión de la infección y el retardo en la
cirugía inicial en los pacientes que sobrevivieron, apoyado en
el análisis de regresión logística, dan un convincente
suporte a la importancia de la intervención quirúrgica
temprana para detener el avance de el proceso infeccioso y
prevenir las complicaciones sistémicas [ disfunción de órganos](14),
al igual que en nuestros pacientes. Otros indicadores de mal
pronostico es la edad, pacientes mayores de 50 años, presencia
de enfermedades subyacentes ( diabetesy aterosclerosis
generalizada) e infección en la región axial, la cabeza,
cuello, tronco o periné(20-21)
En
el tratamiento de
la fascitis necrotizante además de requerir
de un
debridamiento
quirúrgico amplio y agresivo para limitar su progresión,
necesita de reexploraciones mandatorias y debridamientos
posteriores, los cuales pueden ser necesarios cada 24 horas, hasta que todo el tejido necrótico
sea erradicado (3-16-17). No ha podido demostrarse en forma concluyente la utilidad del oxígeno
hiper-bárico.
En
conclusión, el manejo de las infecciones necrotizantes severas
de partes blandas requiere de una temprana sospecha, rápido
diagnóstico y de un precoz y agresivo tratamiento
multidisciplinario médico-quirúrgico, para disminuir la
mortalidad de los pacientes.
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