El vector, transmisor del virus, es
el mosquito (
Aedes
aegypti y Aedes
albopictus ) , el cual, es activo durante el
día ( más en la tarde) y habita dentro de la casa ( sitios
obscuros, armarios, closets, debajo
de la cama). Su ciclo de vida comienza cuando la mosquita
Aedes
aegyti, pone los huevos en cualquier
recipiente que contenga agua (
macetas, floreros, llantas viejas
etc), ahí se desarrolla el mosquito primero como larvas y
luego como insecto adulto. El insecto adulto hembra está en
capacidad de transmitir el virus del dengue, cuando le pica al
ser humano más en la madrugada o en las tardes.
Cada año, en todo el mundo se
estiman unos 50-100 millones de casos de fiebre por dengue y
unos 250.000-500.000 casos de fiebre hemorrágica por dengue.
Más de la mitad de la población mundial vive en áreas
endémicas, con riesgo de infección, la transmisión epidémica es
usualmente estacional, después de la estación lluviosa.
El Dengue
Clásico, es una enfermedad febril-dolorosa típica aguda,
caracterizada por:
Fiebres altas, dolor de cabeza en la frente, dolor detrás de los
ojos, dolores musculares y de las articulaciones, nausea, vómito
y rash (erupción).
La
infección se diagnostica, con un exámen
de sangre, que se debe pedir al 6to día de la enfermedad, que es
cuando se detecta la presencia de Anticuerpos contra el virus
del dengue ( 90% de pacientes con
IgM positivos al sexto día después
del inicio de los síntomas). El periodo doloroso y febril dura
entre 5-7 días, y puede dejar en algunos pacientes una sensación
de cansancio durante varios días más. Aumenta la gravedad de las
manifestaciones clínicas, la edad del paciente, infecciones
previas y enfermedades subyacentes (
diabetes, asma etc).
El
tratamiento del dengue clásico puede ser tratado con reposo en
cama, medicamentos para disminuir la fiebre
( Paracetamol/Acetaminofen),
AAS (aspirina y otros antiinflamatorios),
dipirona, deberían ser evitados,
antihistamínicos para calmar la picazón.
Dengue
hemorrágico, es un síndrome grave relacionado con el dengue, que
suele presentarse entre 3ero y 7mo día de la enfermedad, en
pacientes que previamente han tenido dengue clásico y en los
niños.
Este síndrome se caracteriza:
1.-
Fiebre mantenida.
2.-
Hemorragias mayores o menores (pequeños sangrados en la piel y
mucosas, sangrado por boca y nariz, hemorragias del tubo
digestivo etc), con disminución del
contage de las plaquetas a <
100.000/ul y ( prueba del torniquete
en el brazo positiva)
3.-Evidencia de extravasación plasmática, por aumento de la
permeabilidad capilar, hipoproteinemia
e hipoalbuminemia
( disminución en sangre de los
niveles de proteínas y albúmina), que facilitan la fuga del
plasma y aumento de hematocrito ( % de glóbulos rojos), con la
consiguiente acumulación de líquidos (derrames) en la cavidad
pleural y abdominal.
El
diagnóstico de dengue hemorrágico se fundamenta:
1.-Exámen
de sangre (test dengue) mide los
niveles de anticuerpos contra el virus, y debe pedírselo al 6to
día de la enfermedad, que es cuando se elevan los títulos
anticuerpos IgM.
2.-La presencia de sangrado en la piel, por nariz o boca.
Asociado a una disminución progresiva del recuento de las
plaquetas.
3.-Acumulación de líquidos (derrames) en la cavidad pleural y
abdominal, por extravasación de plasma.
4.-Disminución de la presión arterial por colapso circulatorio
5.-Hay signos de alarma y premonitorios de
shock inminente
( Síndrome de Shock por
Dengue) son: dolor abdominal intenso y persistente, vómitos
persistente, cambios en el nivel de la conciencia (
letargia o irritabilidad), aumento
de las enzimas hepáticas.
La
mortalidad del dengue hemorrágico depende de; si se
diagnosticado a tiempo y si es bien tratado. Si es mal tratado
la mortalidad oscila entre un 44 a 50%.
Toda la población, especialmente los niños y adultos que
tuvieron dengue clásico en la epidemia de la década del noventa,
son susceptibles ( factor de riesgo)
a padecer de dengue hemorrágico, porque el sistema inmune ( las
defensa del organismo) se sensibiliza al reaccionar frente a
otra infección por el mismo virus. Además las condiciones del
país son propicias ( crecimiento
poblacional, acentamientos urbanos
anárquicos y deterioro de la salud pública), sumado a que el
Ecuador al ser un país tropical, es un área endémica, con riesgo
de infecciones epidémicas, usualmente
estacionales, después de la estación lluviosa.
Medidas Preventivas: Control del vector
1.-
Vaciar y cambiar el agua todos los días de jarrones, maceteros,
baldes, cubetas, recipiente de agua de las mascotas, llantas
viejas, cobertores de plásticos etc.
2.-Mantener tapados los reservorios (
tanques) de agua potable.
3.-Drenaje y rellenar con tierra los charcos de agua, zanjas,
acequias, cunetas y trincheras
4.-Mantener tratada el agua de las piscinas y permeables los
canales de lluvia.
5.-Usar repelentes contra los insectos, que contenga DEET (
N,N-diethylmethyltoluamide)
nombres comerciales Skintastic,
Ultrathon , evitar el contacto con
los ojos y la boca, aplicarse nuevamente si se baña, en mujeres
embarazadas y niños se prefieren repelentes a base de PERMETHRIN
spray ( derivado sintético de la planta de crisantemo).
6.-Usar mallas, redes ( telas
metálicas y mosquiteros ), cerrar bien las ventanas, dormir con
mosquitero y aire acondicionado.
7.-
Usar pantalones y camisas de mangas largas y de color
kaki, canela o verde suave. Usar
zapatos, no sandalias, con medias, no andar descalzo, en
pantanos o cienagas.
8.-Reemplazar las luces
brillantes de afuera de la casa, con luces amarillas.