Infección
por citomegalovirus en el embarazo
Es
una enfermedad provocada por un virus de ADN que pertenece a la familia de los
Herpes Virus, que se transmite por múltiples fluidos corporales (contacto
persona a persona, sexo oral, vaginal o anal, transfusiones de sangre,
compartir jeringas, embarazo, parto y lactancia). La enfermedad presenta sus síntomas
en aquellas personas que posean una disminución de sus defensas naturales (SIDA, pacientes con tratamientos corticoideos prolongados o
alteraciones inmunológicas).
Se
la considera como la infección viral congénita más común en los Estados
Unidos, afectando a aproximadamente 40.000 niños por año.
Cuando
ocurre una primoinfección (que ocurre por primera vez) durante el embarazo
hay mayores riesgos de infección en el feto y el recién nacido. Puede ser
causa de parto prematuro y recién nacidos de bajo peso para su edad
gestacional.
Las
vías de transmisión en el embarazo son:
1.Transplacentaria.
2.En el nacimiento, por ingesta de secreciones infectadas.
3. Postnatal, a través de la lactancia o por contacto con secreciones.
Síntomas
Las
infecciones son generalmente asintomáticas, pero a veces puede provocar
inflamación de ganglios, cansancio, fiebre, debilidad general, náuseas,
diarrea o alteraciones de la visión.
El
mayor riesgo de transmisión fetal lo tienen aquellas embarazadas con serología
negativa que desarrollan su primo-infección durante el embarazo.
La
infección viral congénita se presenta en aproximadamente entre el 0.5 al
2.5% de los recién nacidos. Es más alto el porcentaje cuando es consecuencia
de una primo-infección, con transmisión de la enfermedad al bebé entre el
14 y 50%. Cuando resulta de una preinfección el bebé se encuentra protegido
por los anticuerpos maternos, y hay un riesgo de sólo el 1% de enfermarse.
Síntomas
en el recién nacido
En
general la primoinfección es asintomática en el 90% de los casos. Sin
embargo en el 5 al 15% de los casos pueden aparecer disminución de la audición,
alteraciones motoras, retraso mental, alteraciones
en la visión y alteraciones dentales. Todos estos síntomas pueden
presentarse después de años de nacido.
En
un 5% de los recién nacidos pueden aparecer síntomas de infección
generalizada que comprenden hepatomegalia (hígado grande), esplenomegalia
(bazo grande), microcefalia, pigmentación amarilla de la piel
y petequias (pequeños hematomas en la piel y las mucosas).
No
se produce la enfermedad en el caso de que la infección se contagie al bebé
después del nacimiento.
El
diagnóstico se realiza mediante estudios en sangre. El más exacto es la
detección del virus en orina o secreciones. También la detección de
anticuerpos IgG e IgM son útiles en el diagnóstico de la enfermedad.
Esta
enfermedad no tiene cura aunque existen vacunas protectoras en fase
experimental. Se pueden tratar únicamente los síntomas con diferentes
medicaciones antivirales, pero no tiene éxito durante el embarazo.
El
uso de preservativos baja las probabilidades de contagio durante las
relaciones sexuales, pero los besos y otras formas de contacto íntimo también
son contagiosas. Por lo cual, lo más recomendable son las relaciones
estables.
Autor:
|
Dr. BERNARDO CALDERON COSTALES
Ginecólogo Guayaquil
Dirección: Omnihospital. Torre mèdica
Vitalis 1, piso 7 consultorio 704.
Av. Abel Romeo Castillo y Av. Juan
Tanca Marengo Teléfono:
(5934) 2-109082 2-109213 Celular:
0999321963
Guayaquil, Ecuador.
|
|
|